De acuerdo con informes del Servicio Meteorológico Mexicano, la temporada de huracanes para este año inició el pasado 15 de mayo y,con ello, se pronostica la formación de alrededor de 17 ciclones tropicales en el Pacífico Mexicano.
De la anterior cifra, se espera que 8 de estos fenómenos resulten en tormentas tropicales, que 5 alcancen alguna categoría moderada entre 1 y 2, y que los 4 restantes, evolucionen hasta niveles más intensos en categorías que pueden variar entre 3, 4 y 5.
En entrevista, la Dra. Eleonora Romero Badillo, quien es profesora-investigadora del Departamento Académico de Ciencias Marinas y Costeras de la UABCS, señaló que este verano se pronostican condiciones favorables para la presencia de un año Niño; esto después de atravesar por un periodo neutral en cuanto a la temperatura oceánica.
Con ello, se espera que la actividad ciclónica aumente en el Pacífico. A pesar de esta situación, la Dra. Eleonora Romero explica que la probabilidad de que los huracanes impacten la Península sudcaliforniana disminuye, esto debido a que la trayectoria de los ciclones suele desviarse hacia el oeste, es decir, mar adentro.
“Es más probable que un ciclón impacte la Península durante un año neutro, que en un año Niño”, señala la profesora de la UABCS.
Además, mencionó que el periodo traerá consigo mucha lluvia, pues aunque los huracanes no lleguen a tierra, sí son más grandes y por ende dejan una estela de precipitaciones a su paso. Por lo cual, podríamos esperar un buen año en cuanto a lluvia se refiere.
“Independientemente de los pronósticos, siempre tenemos que estar preparados tomando las precauciones y medidas necesarias para afrontar cualquier tipo de situación derivada de un fenómeno natural.
Por supuesto, también es necesario informarse sobre la formación y el trayecto de los ciclones, y lo mejor y más recomendable es hacerlo a través de fuentes confiables y no por medio de rumores”, finalizó la investigadora de la UABCS.