La Diputada Eda María Palacios Márquez (PRS) hizo uso de la tribuna para exhorta a la Ssa Estatal y Federal, al IMSS, al ISSSTE, al Instituto de Salud para el Bienestar para que en el ejercicio fiscal del año 2022 se garantice el abasto oportuno de todas las claves de medicamentos para pacientes con epilepsia en Baja California Sur y que se subroguen las medicinas de última generación que garantizan mejor calidad de vida a los pacientes epilépticos, las cuales no son cubiertas por el sistema de salud nacional y estatal.
“A raíz del planteamiento que me realizo una familia sudcaliforniana, que tiene dentro de sus miembros a menor de edad con enfermedad de epilepsia; el día de hoy estoy proponiendo que el Congreso del Estado exhorte a la Ssa Estatal, realice una amplia campaña de concientización entre la población sobre la epilepsia y su tratamiento. También se propone exhortar a la SEP del estado para que sensibilice a los docentes y alumnado sobre la epilepsia, para evitar la discriminación y exclusión que sufren los estudiantes que padecen de esta enfermedad”, expuso la Diputada, Palacios Márquez.
En sesión, la Diputada María Luisa Ojeda González (PRD) se pronunció a favor de la iniciativa para que los legisladores federales aboguen para garantizar el presupuesto, así como el que se difunda la capacitación para que se atienda esta enfermedad, por su parte Gabriela Montoya Terraza (PT) sugirió que la legislatura eleve la propuesta para que se asigne una fecha particular para el “Día de los Derechos de los Pacientes con Epilepsia en Baja California Sur”.
Se sumó a la propuesta la Diputada Marbella González Díaz, para que se garanticen medicamentos de fácil acceso así como mayor personal medico especialistas.
Lo antes expuesto en razón del planteamiento presentado por la ciudadana Diana Allec López, madre de Diego Vargas Allec, quien padece de epilepsia desde hace 4 años y ha resistido pese a la falta de información, procesos burocráticos y financieros para obtener medicamentos, y la falta de un hospital con el nivel de atenciones requeridas, llevando a su hijo a esperar más de 6 meses para que el IMSS autorice el pase otorgado por su neuropediatra a un hospital mejor nivel.