Los Cabos, B.C.S., 18 Ago. – Con un semáforo epidemiológico que se mantiene en fase 5 naranja y 30 por ciento de la capacidad total permitida en playas del municipio de Los Cabos; el Departamento de Inspección Fiscal, en colaboración con la Zona Federal Marítimo Terrestre y la Dirección General de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal, continúan vigilando las playas públicas a fin de que se respeten, -por parte de los vendedores ambulantes-, los acuerdos y medidas establecidas para evitar contagios por COVID-19.
Con multas que van desde las 50 hasta las 100 Unidades de Medida y Actualización (UMA), para quienes se niegan a acatar las disposiciones de las autoridades en Salud, el jefe del Departamento de Inspección Fiscal, José Manuel Márquez Ceseña, informó que en la playa el Médano todos los días tratan de ingresar vendedores ambulantes sin permiso y vendedores con permiso pero que ingresan en días que no fueron asignados.
“Todos los días hay presencia de inspectores en las playas y realizan la vigilancia permanente en estas zonas para tener un control y que el 30% de vendedores ambulantes sean los que realicen su actividad; en el Médano, equivalen a 80 vendedores los permitidos diariamente de los 478 en el padrón”, destacó Márquez Ceseña.
En ese contexto, el jefe de inspección fiscal en Los Cabos hace un llamado de apoyo a los representantes de los diferentes sindicatos de vendedores ambulantes, para que informen a sus agremiados que la entrada a realizar su trabajo en las playas son los días establecidos dentro del rol semanal previamente acordado, para que el aforo así como las medidas de sana distancia se cumplan.
“Para aquellos vendedores que son sorprendidos sin permiso o que continúan sin acatar las medidas establecidas, las multas van desde 50 hasta 100 UMAS, por lo que el exhorto a seguir los acuerdos y respetar a la autoridad se hace para evitar que sean sancionados”, concluyó el servidor público.