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Con motivo de la temporada de Cuaresma, la Secretaría de Salud en la Entidad a través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), fortalece las tareas de vigilancia sanitaria en establecimientos dedicados a la venta y distribución de pescados y mariscos, crudos y preparados, con el objetivo de garantizar las buenas prácticas en la distribución, conservación y elaboración de los alimentos.
Estas actividades se desarrollan a fin de supervisar las buenas prácticas en el manejo de los productos marinos, a partir de su óptimo estado para la ingesta de consumidores, al ser el periodo del año en que se registra un mayor consumo de pescado, camarón y otros productos del mar, indicó la comisionada estatal, Blanca Pulido Medrano.
En estas visitas a comercios y mercados se constata que estén debidamente refrigerados para evitar su descomposición, además de verificar la trazabilidad de los alimentos, es decir, comprobar el origen de los mismos; además, el producto debe estar en camas de hielo, sin rastros de sangre, vísceras, tierra o cualquier materia extraña que pueda contaminarlos, agregó.
La funcionaria comentó que, adicionalmente, se realizarán muestreos de hielo utilizado en la conservación, así como del agua utilizada para los procesos de lavado, preparación y acondicionamiento en estos comercios, al tiempo en que se verifica que el personal cuente con medidas de higiene y seguridad como son mandil, cubre bocas y cubre pelo, así como aplicar el correcto lavado de manos para evitar riesgos a la salud de ellos mismos y de los clientes.
Finalmente, Pulido Medrano recomendó a los consumidores que antes de adquirir pescados y mariscos se percaten que los ojos y la piel estén brillantes, que las escamas no se desprendan con facilidad y que estén en adecuada conservación, mientras que los moluscos bivalvos deben presentar olor característico a mar y tener la concha firmemente cerrada.
