El agua que la autoridad municipal de La Paz proporciona a la población mediante su sistema de abasto y distribución es segura para uso personal y doméstico, ya sea para beber o para realizar actividades de higiene básica, ya que esta es sometida a procesos de cloración residual conforme lo estipulado por la norma federal.
Esta condición, que es corroborada de manera periódica mediante muestreos efectuados por la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), evita la presencia de microorganismos patógenos, como es la bacteria Burkholderia pseudomallei, que es causante de la enfermedad Melioidosis.
Cabe resaltar que esta bacteria puede encontrarse en cuerpos de agua estancados tras el paso de lluvias, y en tierra que fue removida durante la crecida de arroyos, de ahí que los datos epidemiológicos internacionales indiquen que la transmisión de esta enfermedad ocurre al entrar en contacto con estos elementos sin utilizar guantes, ropa o calzado impermeable.
La literatura médica y científica internacional señala que las personas pertenecientes a sectores de riesgo tienen una mayor susceptibilidad de desarrollar la enfermedad Melioidosis. Estos grupos incluyen a aquellos con diabetes descontrolada u otras enfermedades crónicas que debilitan el sistema inmunológico, así como a quienes consumen bebidas alcohólicas de forma crónica. Además, las personas que tienen contacto con agua y suelos contaminados al presentar heridas o raspaduras también están en riesgo.
En este sentido, la Secretaría de Salud reitera que entre las medidas preventivas destaca evitar el contacto con agua, tierra y lodos, en especial cuando se presente una herida; utilizar guantes, ropa y calzado impermeable cuando deba tenerse contacto con agua y suelos; no bañarse en agua de lluvia, especialmente en lugares donde se estanca; lavar con frecuencia las manos, consumir solamente agua potable y efectuar una preparación higiénica de alimentos.