En esta contingencia por COVID-19, el Gobierno del Estado ha brindado más de 12 mil atenciones en salud mental a sudcalifornianos que requirieron de asistencia profesional, a fin de poder gestionar sus emociones ante esta circunstancia atípica, o para iniciar y continuar tratamientos psicológicos para el abordaje de trastornos.
Este número de intervenciones es resultado del esquema de asistencia telefónica que la administración estatal, a través de la Secretaría de Salud, implementó en esta pandemia para fortalecer la detección oportuna y atención temprana de pacientes con necesidad de asistencia psicológica, indicó el titular del ramo en Baja California Sur, Víctor George Flores.
El funcionario comentó que, el primer componente de esta estrategia, fue el programa de apoyo psicológico para personal de la salud que labora directamente en áreas COVID y servicios hospitalarios, pero, además, se habilitó un modelo de atención a distancia con llamada y videollamadas, para consultar a ciudadanos en general durante este periodo de resguardo sanitario.
“Este esfuerzo se complementó desde agosto pasado con el restablecimiento de las consultas presenciales y programadas, que se realizan con apego a los protocolos sanitarios en las nueve unidades que forman parte de la Red Estatal de Salud Mental y Adicciones (RESMA); integrada por seis centros de atención primaria en adicciones (CAPA), dos unidades médicas especializadas en salud mental (UNEME) y la Clínica para Dejar de Fumar. Esta labor también es respaldada por los especialistas del programa “Línea de la Esperanza”, que tienen la prioridad de atender a pacientes en situación de crisis”, abundó.
Finalmente, el Secretario de salud reconoció al grupo de psicólogos que laboran en estas instituciones, quienes además de prestar estos servicios terapéuticos a distancia, han participado activamente en la impartición de talleres por redes sociales con temas como el manejo de la ansiedad, técnicas de relajación y respiración, higiene del sueño, autorregulación emocional, manejo del duelo, herramientas para activar la resiliencia, entre otros.